
Laura Yánez, nacida en Caracas, Venezuela. Es Licenciada en Enfermería. Su interés por la poesía se alimentó de sus lecturas de clásicos y modernos. Autores de obras poéticas como Andrés Eloy Blanco, José Antonio Ramos Sucre, Julio Garmendia, Rafael Cadenas, Aquiles Nazoa, Emilta Rosa Vivas. Autores internacionales como Gabriel García Márquez, Juan Rulfo, Fiódor Dostoievski o Edgar Allan Poe. Hace dos años cruzó el océano y vive en Valladolid, España.
DELIRIO DE LAS TARDES…
Recuerdos
Sacuden recintos
Apagados.
Espantando sombras.
Alterando el sosiego que
pretendí tener.
destemplando el tiempo.
“LA VIDA”
Ser,
para luego no estar.
Hasta que no estemos más nunca,
nunca más.
Hasta deshacernos transparente,
como la transparencia del todo.
YO
Debo irme a tocar mis mentiras.
Quisiera que alguien rociara mi inexistencia.
Frío de vidrio,
silencio húmedo el de hoy.
MI VIDA
Siempre vi todo con ojos de llanto,
nunca lo pude evitar.
La incomprensión se adueñó de mí,
fue deformando mi espalda.
El cuerpo intuye,
se destila el pensamiento,
se agudiza la palabra,
el rostro traduce.
TRISTEZA PROFUNDA
Tiempo.
Impalpable, invisible,
deforma hasta desvanecer presencias.
Tiempo que determina el grosor de mis venas,
la transparencia de mi piel.
Que me hostiga,
con el acoso de la nostalgia.
TIEMPO QUE DESVANECE…
Sólo hay tiempo.
Sólo hay tiempo que pesa,
que arruga,
que arruina hasta los recuerdos.
Sólo eso,
sólo tiempo que llamamos tiempo y
que no deja nada.
Como ahora que hay nada,
diluye el alma.
Se fue todo,
una vida, un mundo,
promesas, anhelos,
frustraciones,
todo.
Tiempo,
que sólo se dedica a dejar ausencias,
descompone cuerpos.
¿Cómo hago para entenderte…?
¿Dónde han ido los que han sido parte de mí?