IVETTE DÍAZ ESPÍN. (Caracas, Venezuela 1992) Ilustradora y Artista Plástico. Licenciada en Artes Visuales, realiza sus estudios en UNEARTE (Armando Reverón) donde se especializa en los Medios Mixtos. Inicia su carrera desempeñándose como diseñadora de producción y ambientadora en un largometraje independiente, dedicándose posteriormente de lleno a las artes visuales. Ha participado con su trabajo fotográfico en varias muestras colectivas en distintas ciudades del país. Actualmente se dedica a la ilustración y a las artes visuales desarrollando las series Bestiario, Tarot y Oráculos, así como diversos proyectos interdisciplinarios. Su trabajo como ilustradora ha sido publicado en diversas plataformas editoriales independientes. En 2017 ilustra el poemario Medulla Oblongata de la poeta Kelly Martínez-Grandal publicado por CAAW Ediciones. Radica en Barcelona, Catalonia.
Selección por Gladys Mendía de Tabula Rasa (inédito)
I
Mi cuerpo choca contra el mar
Como si fuera de aceite
No forma parte ni se quema
No ebulle
Se tuerce como una vela prendida
debajo de la sal profunda
Porque mi cuerpo no está hecho para el mar
Porque el mar está hecho de pureza
Porque lo que se retuerce no sabe nadar
Ni disolverse
VI
Hombre muralla
hombre pared
hombre mueble
tu cumbre erguida
hierática
me deja recostarme encima de tu cuerpo
impenetrable
sin puertas
ni ventanas
inamovible, inerte
enorme
Mahoma siempre iba a la montaña
pero Mahoma ya no va más
VII
Tiene la columna elástica
y lleva cuernos en la cola
las uñas largas
los dientes
pequeñitos,
De sus tres estómagos
uno siempre tiene hambre
El deseo es un animal de siete patas
VIII
Quiero de tu boca
el filo
que habla
Las manos que amerizan
el río de ombligo
y vientre
Quiero que tu cuerpo sea
una casa en medio de la lluvia
Las ventanas abiertas
el aullido del aire
el silencio,
pero contigo
X
Tabula Rasa
Tú eres para tocarte con mano de “pluma”
para ti no es el hierro
ni el despojo, ni el tajo
Si yo fuese un animal
si me ganara la estepa
te sacaría de inmediato
de mi boca caliente
Para ti no es este río
de piedras heladas
ni el golpe de arrecife
ni el pantano
Para ti es el templo
una marea limpia
Quisiera darte la tregua
la calle después de la lluvia
calma
Tabula rasa
golondrina
silencio
XI
Yo quería del amor lo más profundo
el fuego
la ceniza
el azar
el rito
Después de los incendios recogí el despojo
y cuando abrí los ojos
todo era tierra quemada
Llegaste como un silbido
un oso entre las ramas
llegaste con la tregua entre las manos
Te beso
por todos los golpes
que no sabes darme